El flamante refuerzo de Quilmes de Mar del Plata debuta en la temporada 2011/12 tras una mala experiencia en Regatas de Corrientes. Sus objetivos en el Cervecero y “la motivación para aceptar la oferta con la llegada del ´Beto´ Martínez”
- Llegas a un equipo con el peor promedio de la temporada y con cambios intensos en el plantel, ¿Cómo te planteas afrontar esta segunda fase?
No sé cómo estaban antes. Sólo vi el partido televisado frente a Weber Bahía Blanca Estudiantes y hablé con jugadores que conozco; ha cambiado un poco la cara en el partido del viernes. Hay que intentar descontar puntos seriamente e jugar en equipo porque esto se revierte haciendo una buena defensa. Durante la semana entrenar y realizar nuestras jugadas. Acoplarnos defensivamente porque creo que es esencial en este momento que estamos pasando.
- Estuviste bastante tiempo sin jugar en la alta competencia por la llegada de Paolo Quinteros, ¿Te molesto la determinación que tomó Regatas de Corrientes?
Al principio, me molesto un poco y fue en las primeras horas. Después, pensé que es nuestro trabajo y el club puede traer a la gente que quiera. Uno estuvo despedido del trabajo por nada; porque no es que jugué mal y me cortaron. Por ese lado, me da un poco de bronca. Con el transcurso de los días, me di cuenta que es un trabajo y ahora llegué a Quilmes por el corte del Gallego (Esteban López). Sé lo que debe sentir en este momento pero bueno, sabemos que estamos trabajando para una “empresa” y si hay que traer otros jugadores, habrá otras posibilidades también.
- ¿Cuándo debutarías en el equipo?
No. Estuve probando algunos saltos con el kinesiólogo y durante la tarde, estoy trotando de a poquito pero me molesta bastante. Si bien, tengo un esguince leve de cuatro o cinco días. Quiero jugar pero tengo que estar tranquilo porque faltan muchísimos partidos, si juego el domingo y me vuelvo a resentir, van a pasar semanas. El tobillo todavía está un poco resentido. Hay que ponerle tranquilidad y recuperarlo bien para poder estar en los próximos partidos de visitante.
- ¿Te motivó la llegada del “Beto” Martínez al club para aceptar la oferta? Ya que lo tuviste en Gimnasia y Esgrima de Comodoro Rivadavia.
Quilmes inició tratativas conmigo hace un mes y medio, estaba en duda por cosas que me habían contado. Después, cuando me enteré que venía “Beto”, estuvimos hablando con él sobre el tema del equipo y qué quería hacer. Yo le comenté cómo estaba y un poco me empujo para que llegue a Quilmes. Si él no hubiese venido, habría sido más difícil mi llegada. Entre los dos, nos conocemos muy bien y todo lo que me explicó que tiene en mente, me sedujo para que esté acá. Quilmes tiene un buen equipo, quizá no se exprime demasiado lo que cada uno le puede dar. No todos los jugadores tienen que hacer 20 puntos; no todos los jugadores tienen que agarrar rebotes. Cada uno tiene que hacer su trabajo y el entrenador saber exprimir las individualidades. En poquitos días, no se puede explicarle mucho a los jugadores pero creo que “Beto” lo está haciendo desde que llegó.
- ¿Cómo viviste este mes y medio sin jugar en la alta competencia?
Tengo dos hijos y disfruté de ellos. Tengo a mi hija Isabella de tres meses y Lorenzo de dos años y medio junto a mi señora. Nos fuimos a vivir a la casa de mi concuñado en una casa enorme y estaba diez puntos. Te cuesta un poco porque nunca me pasó de iniciar la liga de esta manera. Necesitaba un colchón de algodón y ahí me lo dieron. Si bien entrenaba en San Isidro de San Francisco que me dio una mano enorme, ellos supieron darme el calor y yo me refugié en mi familia que es lugar donde uno tiene que agarrar fuerzas.
- ¿Y cómo quedaron las relaciones con los dirigentes de Regatas?
No sé cómo habrán quedado. No entendí un par de cosas de Corrientes. Cuando me avisaron del corte, me invitaron para seguir entrenando y quedarme a vivir ahí hasta que consiguiera algo porque me dijeron que iban a respetarme el contrato. Había una cláusula que, si en diciembre Paolo (Quinteros) no consigue club o no pueden renovarle, me ofrecieron quedarme. Tendrán que cumplir la parte de su contrato. Si bien no me están pagando pero, supuestamente, pueden pagar el libre deuda. Yo tuve relaciones con pocos dirigentes, estuve diez o quince días. Me presentaron al Presidente y a uno más. Digamos, no existió la relación entre los dirigentes y el jugador. Si bien, tampoco el club debe tener tantos dirigentes.
- A partir de ahora, es superar el esguince que sufrís y recuperar el nivel que tenías en la temporada pasada.
Como te dije, estar con la cabeza tranquila y recuperarme bien. Poder darle a Quilmes todo. Como siempre digo cuando voy a un club, voy a intentar dejar todo en la cancha. El equipo necesita de todos. Voy a tratar de brindar lo mío que es la defensa y contagiar al que tengo al lado. Soy un jugador de equipo, no soy un jugador individualista. Cuando llegué, le decía la gente que nos venga a alentar, que nos venga a dar un empujón y que nos siga apoyando. Si no puedo jugar el domingo, hay chicos que lo pueden hacer muy bien y podemos ganar tranquilamente. Ojalá que en los próximos dos partidos pueda estar en la cancha aportando mi granito de arena al equipo.
Sebastián Saijo y Emmanuel Dalle Mura - Reloj de 24.
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